Nuestro taller
Joyería
Hacemos nuestras joyas a mano y con cuidado. Los diseños se imaginan previamente y luego se materializan.
Los precios de las joyas de marca suelen ser altos. De hecho, en la industria estándar, hay muchos intermediarios antes de que la joya finalmente se ponga en el mercado. En Shelyah, apuntamos a un proceso de creación y venta más local. La localidad permite la reducción de costes, pero también la proximidad con el cliente. Por lo tanto, cuando compras una joya Shelyah, solo pagas por el diseño y la calidad de las materias primas, ¡nada más!
Todas nuestras joyas son, por tanto, cuidadosamente elaboradas desde cero por nuestro equipo de diseñadores y joyeros en Bruselas.
Nos esforzamos por encontrar los mejores materiales y utilizar las mejores técnicas de fabricación posibles. Optamos por las soluciones más rentables que cumplen con nuestros requisitos estéticos y de alta calidad.
Y debido a que supervisamos personalmente cada paso del proceso de fabricación, desde la mesa de dibujo hasta el producto final, podemos ofrecer joyas de calidad a precios asequibles para todos.
Queremos ser lo más transparentes posible con respecto al proceso de fabricación de nuestras joyas. De hecho, la elección de nuestros proveedores de materias primas se realiza cuidadosamente. Para nosotros es importante respetar nuestros valores éticos y medioambientales.
La rigurosa elección de nuestros fabricantes de joyería es el centro de nuestra estrategia
Solo trabajamos con fabricantes de joyas que comparten nuestros valores de calidad e integridad. Somos bastante exigentes siempre que la calidad de nuestros productos dependa de lo riguroso que sea su trabajo.
Cuando nos decidimos por una nueva alianza, siempre tenemos en cuenta el nivel de experiencia, las competencias técnicas y el control de calidad. También verificamos las políticas sociales y ambientales implementadas: desde la transparencia hasta los precios justos. Como tendemos a ser lo más transparentes posible, hemos optado por no trabajar con fabricantes cuyo taller no hemos podido visitar.
Actualmente trabajamos con joyeros ubicados en el norte de Italia y cerca de Amberes. Se dice que estos lugares son los dos mejores para hacer joyas. Nuestros proveedores de materias primas también se encuentran cerca de estas áreas, lo que evita el transporte mundial.
A lo largo de los años, al compartir experiencias, nos hemos acercado mucho a nuestros socios. Visitamos cada taller con regularidad, por lo que hemos construido una relación sólida y transparente con cada uno de ellos que, según nosotros, se puede sentir en la calidad sustentable de nuestros productos.